Consecuencias de usar la plancha del pelo

Si tienes ganas de lucir un pelo bonito y con un peinado que se vea perfecto, el uso de una plancha para alisar el cabello o de una plancha para marcar las ondas o los rizos, parece ser una buena solución pero una cosa es recurrir a este tipo de instrumento para el secado del cabello de una forma muy puntual y otra muy distinta es la de usarlo de manera recurrente dado que puede hacer que tu cabello acabe realmente reseco, con encrespamiento y otras consecuencias de usar la plancha del pelo que a continuación os vamos a enumerar.

Sequedad

A veces cuando notas que el cabello saca humo al pasar la plancha piensas «¡vaya puede que esté quemando el pelo!». No es así del todo. Lo que está pasando es que sale vapor a partir de la humedad de tu propio cabello. De hecho, la plancha filtra la humedad de tu cabello de modo que este pueda quedar completamente liso. Eso se traduce en un peinado perfecto pero que a la larga, el cabello quede sin humedad y en consecuencia se acabe resecando hasta el punto de notar un cabello sin vida, apagado y además con las puntas realmente destrozadas. La plancha del pelo despoja al cabello de sus aceites naturales y las consecuencias de ello son más que visibles.

Al margen de dejar de usar la plancha durante un tiempo, es necesario recurrir a una buena recuperación de esos aceites naturales para que el pelo vuelva a estar hidratado y tenga esa humedad antes comentada. Para ello, puedes usar el champú nutritivo sin sulfatos Dalire así como la crema nutritiva sin sulfatos Dalire ya que la combinación de ambos productos te permitirá restaurar el equilibrio en tu cuero cabelludo y además lograr que esté nutrido y que el pelo vuelva a verse bonito y saludable. Dos productos que cuentan con una fórmula sin sulfatos con ingredientes como el coco, que penetra hasta las capas más profundas de las fibras capilares para poder proteger y reparar tu cabello, así como el romero, el tomillo o la ortiga capaces de estimular y revitalizar tu cabello.

Frizz o encrespamiento

Debido a esa perdida de aceites naturales que os acabamos de mencionar, el pelo no sólo comenzará a verse cada vez más reseco sino que además, dicha resequedad te pasará factura porque notarás el cabello cada vez más encrespado. Si deseas evitar el frizz prueba la combinación de productos que os hemos recomendado, especialmente la crema nutritiva Dalire. Aplícala de medios a puntas y deja actuar entre 5 y 10 minutos (dependerá del largo de tu cabello) para un resultado en el que de inmediato notarás el pelo más suave e hidratado.

Rotura

Debido a la resequedad del cabello ante la pérdida de los aceites naturales y de la humedad del pelo, notarás también como las hebras capilares se rompen también con mayor facilidad. Notarás como de hecho tu pelo está realmente frágil y quebradizo.

Puntas abiertas

Debido al calor constante que aplicas cuando te alisas el cabello, la resequedad que este acaba adquiriendo se refleja también en las puntas que se verán completamente abiertas. Incluso si estás acostumbrada a cortar las puntas, notarás que cada vez te resulta más complicado mantenerlas cerradas.

Pelo apagado

Gracias a los aceites naturales que se segregan desde tu cuero cabelludo a tu pelo, este se ve sedoso, brillante y bonito. Si usas constantemente la plancha, notarás como el pelo parece que no tiene nada de vida. Tu pelo quedará opaco y por mucho que te esfuerces será imposible que lo notes con movimiento.

Caída del cabello

Al margen de que tu pelo se vea cada vez más frágil, más reseco y más apagado, lo cierto es que corres un verdadero riesgo si usas la plancha constantemente. El motivo no es otro que acabar con unas raíces tan sumamente debilitadas que finalmente notes como la densidad de tu pelo decrece lo que significa que estás perdiendo pelo. No es que la plancha en sí haga que el pelo se te caiga, no te asustes, pero su abuso tiene ese peligro así que antes de usar la plancha a diario o a cada momento, debes pensarte si es realmente necesario.

Piensa además que existe un problema todavía mayor a todo lo mencionado. Si usas la plancha durante años o cada vez que has de peinarte, corres el riesgo de acabar matando del todo los folículos pilosos, lo que se traduce en una caída permanente del cabello que será bastante complicada de detener.

Picazón en el cuero cabelludo

Cuando usas con demasía la plancha y el cabello se queda sin sus aceites naturales, comienzas a notar como las raíces te pican, y el cuero cabelludo es posible que acabe también con descamación llegando a extenderse además a la frente. Un problema que deberás tratar con un dermatólogo pero que puedes ayudar a resolver con el uso de los dos productos Dalire antes mencionados para procurar que el cuero cabelludo comience a regular la emisión del sebo natural en tus fibras capilares.

Textura del cabello alterada

Si usas de forma continuada la plancha para alisar el cabello sabes que el riesgo que se corre es que notes que el pelo está reseco, sin vida y con mucho encrespamiento. Todo ello pasa factura a la textura sedosa o suave que solía tener tu cabello que ahora, al pasar los dedos o al peinarlo notarás como tiene un tacto similar a un pelo pajizo. La solución es el uso de la mencionada crema nutritiva Dalire que será bueno que apliques cada vez que laves tu pelo con el champú nutritivo Dalire.

Por otro lado, puede que lleges a notar también como incluso tu cabello se nota de dos maneras distintas. Es decir, que la parte superior se llega a ver rizado u ondulado mientras que la parte inferior se nota más lacia o suelta. Algo que notarás sobre todo cuando laves el pelo y esté mojado. El desequilibrio en la ausencia de una buena hidratación en tu pelo provoca esta textura tan desigual en las raíces, los medios y las puntas.

Crecimiento del cabello más lento

Si tienes el pelo dañado por el uso constante de la plancha conseguirás además que el cabello no te crezca al ritmo que debería. La ausencia de aceites naturales y el hecho de que el cabello no tenga oportunidad de crecer bien hace que notes que tu pelo no acaba de crecer como cabría esperar.