Cómo simplificar tu rutina de lavado según tus necesidades capilares

¿Cómo simplificar tu rutina de lavado según tus necesidades capilares? Si deseas lucir un pelo sano, brillante y reluciente es esencial usar productos adecuados y para ello, necesitas identificar el tipo de cabello que tienes y elegir a partir de ahí el champú y productos que ayuden a su cuidado e higiene.

Pelo seco

Si tienes el cabello seco es porque tu cuero cabelludo no produce grasa suficiente como para que el pelo esté sano y por ende fuerte y con elasticidad. Tu pelo se ve frágil y quebradizo y además seguramente se encrespe con facilidad y te cueste mantener el peinado. Puede que hayas abusado de tintes o que hayas utilizado productos con químicos demasiado agresivos que con el tiempo han acabado por afectar a la producción de grasa por parte de tu cuero cabelludo. Debes elegir un champú que te aporte la hidratación y nutrición que necesitas y en ese sentido, el champú nutritivo Dalire sin sulfatos es el mejor para ti. Con ingredientes como el abedul, que estimula el cuero cabelludo, el coco que gracias a los  triglicéridos de ácido láurico penetra hasta las capas más profundas del cuero cabelludo para repararlo, o la ortiga y el tussilago, entre otros, que acondicionan el cabello lograrás que el cuero cabelludo pueda restablecer la producción del sebo que necesitas. En cuanto al número de lavados, puede que sea recomendable lavar dos o tres veces por semana.

Además, será necesario el uso del acondicionador sin sulfatos Dalire tras lavar el cabello. Aplicado de medios a puntas, acabará con la deshidratación y te permitirá además facilitar el peinado sin necesidad de que tengas que pegar tirones o debilitar más tu pelo.

Punto extra para la mascarilla que debes aplicar una o dos veces por semana. En este sentido, te recomendamos la crema nutritiva sin sulfatos Dalire que con ingredientes como los antes mencionados, te aportará un extra de hidratación para un pelo brillante y sedoso.

Pelo graso

Si tu pelo es graso es debido a que tu cuero cabelludo produce un exceso de sebo. Puede que estés usando un champú con tensioactivos demasiado agresivos que hacen que el cabello sufra y tienda a resecarse o a estar deshidratado lo que provoca que el cuero cabelludo genere más y más sebo para protegerse y de ahí que se vea graso dando como resultado un cabello de aspecto aceitoso, aplastado y que parezca que está siempre sucio.

El champú con extracto de cebolla sin sulfatos es un tipo de champú que te permitirá cuidar y revitalizar el cabello para evitar ese aspecto graso e incluso su caída. Tiene ingredientes como el pomelo y la bardana, que también están presentes en el  Champú sin sulfatos Dalire  y que puede venirte también bien. En este caso puede que necesites lavar el pelo dos veces por semana.

Para un restauración de la producción de sebo que sea adecuada, te recomendamos también acondicionar el cabello con el acondicionador sin sulfatos Dalire y la aplicación una vez por semana de la crema nutritiva sin sulfatos Dalire.

Pelo normal

Si tienes cabello normal estás de suerte ya que tu cuero cabelludo produce una cantidad uniforme de grasa, de modo que no tendrás apenas problema en que tu pelo luzca brillante, con fuerza y elasticidad, todo lo contrario a lo que hemos comentado hasta la fecha. Cuidas bastante tu pelo y por ello te ves recompensada/o con un pelo fuerte y saludable así que no bajes la guardia. En el caso de que desees seguir así te recomendamos el cuidado con el champú clásico de Dalire, el Sin sulfatos Dalire que como los anteriores, cuenta con ingredientes naturales que garantizan higiene y cuidado, pero además, no olvides el acondicionador y la crema o mascarilla. En ambos casos te recomendamos las ya mencionadas de Dalire y una rutina de lavado igual a la que ya sigues. Es decir, que si te lo lavas dos veces sigue haciéndolo, y si lo haces tres, también, pero no excedas ese número de días.

Finaliza tu rutina de cuidado de cabello, sea como sea este, aplicando también el protector UV Keratina Dalire, para acondicionar y proteger tu cabello tanto antes como después de exponerlo al sol. De este modo evitarás que los rayos UV afecten al cabello y una vez vuelvas a casa que el pelo se pueda rehidratar y reparar.